Cuidados de tus nuevos muebles

Comprar muebles de melamina garantiza espacios atemporales, pues su acabado es muy resistente. Pero si quieres asegurarte de que todo dure más y luzca mejor, en este blog repasaremos algunos puntos útiles para enseñarte cómo cuidar tus nuevos muebles de melamina.

Los muebles lacados y barnizados ofrecen acabados de primera calidad, si bien es cierto que requieren unos mayores cuidados y su limpieza requiere de algo más de dedicación.

No obstante en Muebles Tejeda nos aseguramos de proporcionarte los modelos de la mejor calidad disponible. Por esta razón nuestros muebles no requieren mucho esfuerzo para limpiarlos o mantenerlos en buen estado. Básicamente, al elegir nuestros productos, sus cuidados y limpieza serán fáciles de hacer.

Mover los muebles: Este consejo específico se aplica a todo tipo de muebles, porque no se trata solo del material en sí. Siempre que tengas que mover muebles pesados es mejor pedir ayuda a alguien, porque recomendamos levantar la pieza. Levantarla es siempre mejor que arrastrarla, ya que ayudará a evitar daños en las partes de unión y toda la pieza se mantendrá en buen estado durante años. Evita mover camas compactas o camas nido ya que éstas no están diseñadas para ser arrastradas por la habitación, y pueden sufrir desajustes indeseados si las arrastras.

Partes móviles: nuestros muebles de melamina vienen con guías en los cajones y bisagras metálicas en las puertas, éstas ayudan a mantener la estructura y también brindan excelentes características y funcionalidad. A veces, este tipo de partes se olvidan, nosotros te recomendamos limpiarlas ocasionalmente con un paño seco que no desprenda pelusas. Nunca fuerces la apertura y cierre de cajones y puertas, los mecanismos pueden sufrir deterioro si esto se hace contínuamente. para ello evita sobrellenarlos e introducir ropa y objetos a presión.

La melamina es un material versátil y duradero ampliamente utilizado en muebles. Para asegurar que tus muebles de melamina mantengan su apariencia y duren más tiempo, es crucial limpiar los derrames de inmediato para evitar que se filtren en la melamina y causen daños. Utiliza un paño suave y seco para limpiar las manchas de líquidos, evitando frotar demasiado fuerte para no dañar la superficie. Asegúrate de secar bien la superficie para eliminar cualquier residuo. Si quedan restos puedes humedecer el paño y aplicarle un poco de jabón líquido, vuelve a pasarlo y a continuación pasa un paño completamente seco.

Evita el uso de productos de limpieza comerciales, aunque si encuentras manchas de bolígrafo o rotulador por ejemplo, puedes utilizar alcohol metílico en un paño suave, realizando movimientos circulares. Luego, asegúrate de limpiar bien el área con agua y un paño húmedo para eliminar cualquier residuo de alcohol.

Muebles lacados y barnizados: mantén tus muebles secos y protégelos de derrames utilizando protectores, manteles individuales, o posavasos. Limpia los derrames de inmediato para evitar daños por agua y mantener el brillo del acabado lacado/barnizado. Evita colocar objetos pesados directamente sobre la superficie del mueble para prevenir arañazos. Considera utilizar tapetes de goma o pegar protectores de fieltro bajo los objetos. Realiza una limpieza regular del polvo utilizando un paño limpio y suave o un plumero antiestático para evitar la acumulación de polvo. Si aprecias manchas evita siempre el uso de productos de limpieza que contengan amoníaco o lejía, ya que pueden dañar el acabado lacado o barniz. Utiliza una solución de jabón suave e incoloro para la limpieza general. Mezcla 1/2 cucharadita de jabón suave con 1 litro de agua tibia. Sumerge un paño limpio en la solución y exprime el exceso de agua, asegúrate de que el paño esté húmedo pero no mojado. Limpia el mueble en movimientos rectos hacia abajo o en un solo sentido, evitando movimientos circulares. enjuaga el paño y escúrrelo muy bien, limpia los restos de jabón. Utiliza un segundo paño seco para retirar la humedad de la superficie, recuerda no hagas movimientos circulares.

Prevenir los efectos UV: La exposición directa al sol significa exposición a los rayos UV. La radiación UV es parte de la energía que constantemente proviene del sol. Al igual que ocurre con otros materiales, la melamina cambiará de color y envejecerá, perdiendo textura y calidad. Una forma de prevenir los daños causados por los rayos UV es colocar tus muebles de manera que no reciban luz directa del sol o evitar que incidan sobre ellos mediante persianas, visillos o estores. Esto también es de aplicación a muebles con acabados lacados y barnizados.

INFORMACION UTIL PARA COMPRAR